Vacaciones. Días de desconexión y tranquilidad. De olvidarnos de todo… o no. En estos días tan calurosos, sin horarios, sin rutinas y sin cobertura en el móvil (para los más suertudos) no podemos olvidarnos de seguir revisando las cabecitas de nuestros retoños, y por qué no, del resto de la familia porque, ojo, los piojitos no están fuera de vacaciones.

Estos bichitos siguen expandiéndose de cabeza en cabeza, y ahora, con las temperaturas al rojo vivo, son muchísimo más activos y las infestaciones más rápidas, pues los huevos eclosionan antes de lo normal por lo que el ciclo vital se acorta de 8 ó 9 días a 5 ó 6. En estos días de diferencia, se multiplican el número de piojos en una cabeza en casi un 30% más que en los meses más fríos del año. Y, para colmo, al estar disponiendo de ocio y tiempo libre, los lugares de posible infestación aumentan y no se centran sólo en los coles: escoletas de verano, parques acuáticos, piscinas comunitarias, públicas… y un largo etc. que nos lleva a todos los papis de cabeza.

Así que, en vacaciones, continuad con la prevención (repelente, uso de lendrera y recogidos en pelo largo) y para cualquier duda, no dudéis en venir a vernos a Pipis Stop para poder seguir disfrutando del verano y no volver a casa con huéspedes indeseados, es la forma más segura de mandar a todos los piojitos fuera de nuestras vidas.